Chihayafuru es una de esas razones por las que sigo viendo anime, a pesar de encontrarme (especialmente en los últimos años) con productos de lo más decepcionantes. Esta segunda temporada está producida también por Madhouse y dirigida por la misma persona que la primera, Morio Asaka, aportando otros 25 episodios más para la adaptación animada del manga de Yuki Suetsugu.
Intentaré no soltar algún spoiler importante, pero algún detalle de menor importancia de la primera temporada se me escapará para comentar alguna cosa concreta.
La historia comienza donde terminó la primera temporada, con el club de karuta de Chihaya ya a pleno rendimiento, e intentando reclutar a nuevos miembros a la vez que siguen entrenando para los futuros torneos que se les vienen encima, así como intentar progresar en las distintas categorías.
En esta nueva temporada nos ahorramos ya la presentación de los personajes principales como la propia Chihaya, Taichi, Kanada, Desktomu o Nikuman, personajes que ya conocemos en mayor o menor medida y que en esta temporada siguen estrechando lazos y se les ve con más confianza entre sí. Continuar sabiendo qué ha sido de ellos es una gozada, y la interacción entre ellos sigue siendo uno de los platos fuertes de la serie, si no el que más. Chihaya, especialmente cuando está alocada y nos regala esos instantes de comedia tan agradecidos, ya se ha convertido en uno de mis personajes favoritos.
En esta temporada se dedican algunos episodios al principio a intentar presentarnos a nuevos personajes que se suman al grupo, y creo que estos nuevos personajes, de forma general, no han estado todo lo aprovechados que podrían. De alguna forma, no me ha terminado de dar la sensación de que "pertenecen al grupo", y me ha costado abandonar esa sensación. A pesar de todo, sí que proporcionan algún gran momento en la serie, como por ejemplo el corte de uñas más épico que habré podido ver en una serie. Además, sí que es curioso e interesante ver su evolución, cómo su implicación con el club varía, desde su motivación inicial para apuntarse, a las sensaciones que transmiten al final de la temporada. No dudo de que pueden dar más juego en el futuro.
En esta temporada se ha dado mucho peso al torneo de clubes, bastante más que en la primera, donde los minutos tenían que repartirse para conocer a los personajes. Volvemos a ver caras conocidas y las diferentes rondas, salvo alguna excepción, fueron todas muy entretenidas, demostrando que la serie funciona bien también en su apartado deportivo. Era interesante ver a los nuevos competir y cómo se van introduciendo en este mundillo, y por otro la serie sigue siendo tremendamente entretenida y juega con varios factores, dando a cada personaje su momento de gloria o de comedura de cabeza. Al ser cada ronda una partida al mejor de 5 victorias da mucho juego para que haya alguna sorpresa, tanto para las victorias como para las derrotas, y esta temporada ha tenido algunas victorias muy chulas y reconfortantes para algunos personajes.
La excepción que comentaba es la ronda contra Megumu, que encadenó una serie de episodios que, si bien no me parecen en absoluto malos, no llegaron a engancharme tanto como las partidas precedentes y posteriores. Me parece que en la parte central del torneo el ritmo se resiente, y coincide además en que esta temporada ha sido más largo que en la anterior. Como en esta serie me gusta más la interacción de los protagonistas, cuando se alargaba una partida contra una rival que además no me resultaba especialmente interesante (a pesar de que debería serlo), noté un pequeño bajón.
A pesar de todo, Chihayafuru tiene el mérito también de que algunas partidas donde los miembros del grupo no participan también consiguen captar la atención del espectador, como cierta partida entre dos monstruos del karuta. Curiosamente, aunque estos personajes no sean los más carismáticos, ver el nivel desplegado en el juego fue algo espectacular, y nos lleva a pensar cómo afrontarán nuestros protagonistas este escalón en el futuro.
En lo que respecta al apartado de las relaciones entre los personajes, especialmente al triángulo Taichi-Chihaya-Arata, creo que sufre del mismo problema que los novatos. Hemos pasado tanto tiempo viendo al grupo, que, al menos en mi caso, cuando meten a Arata... no me termina de encajar. Hemos visto mucho de Taichi y Chihaya, y ahora Arata me resulta un extraño, máxime cuando se ve que solo tiene que hacer una llamada para dar la sensación de tirar por tierra cualquier atisbo de avance en el otro sentido. Se mantiene así un delicado equilibrio que en ocasiones me resultó un poco frustrante, porque lo veo muy descompensado.
Parece que ha quedado una reseña negativa por algunos comentarios en ciertos puntos, pero nada más lejos de la realidad. Es que todo lo demás es de sobresaliente y sería repetir todas las bondades de la primera temporada, que eran muchísimas. Chihayafuru sigue siendo una gozada de ver, y era de las series, tanto de anime como de no-anime, que más estaba esperando ver semana a semana. Una serie muy entretenida y disfrutable, y además con una calidad de animación bastante notable y constante.
Es cierto que este temporada me ha gustado un poco menos que la primera, pero no es nada grave, esos detalles que he comentado no empañan demasiado una de las mejores series anime de los últimos años. Sigue siendo altamente recomendable. Lo peor, más allá de los detalles sobre tal o cual ronda o si los nuevos se sienten integrados o no, será esperar a ver cómo continúa la historia, al menos si uno decide esperar a una nueva temporada de anime.
Tienes que pasarte al manga :)
ResponderEliminarSip, al final voy a terminar cayendo en el manga; a ver si avanzo con las series que tengo pendientes y empiezo con esta xD
EliminarAmo Chihayafuru =) He disfrutado de esta temporada igual que disfruté en su día de la primera, y aunque es cierto lo que comentas de que los nuevos parecen que no terminan de adaptarse al grupo, pienso que es porque los otros llevan más tiempo juntos y han formado lazos muy fuertes por lo que eso ha de notarse cuando se relacionan con los que vienen "de fuera", no sé si me explico xD ¿Shinobu no te parece carismática? pero si es la caña XD a mí me fascina, cómo puede ser tan seria y fría para algunas cosas y lo chalada que está para otras jajaja Respecto a Arata, pienso que tiene un rol fundamental en la serie pero todavía no ha tenido oportunidad de desempeñarlo, aunque obviamente espero que no se interponga en el camino sentimental de mi adorado Taichi ehem xD Yo me resisto a leerme el manga, paso de quedarme más enganchada aún xDD
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo, creo que ese es el motivo. Seguro que si sigue la serie y van repartiendo minutos, esa sensación desaparecerá. Es más, a lo largo de la temporada ya daba esa impresión.
EliminarShinobu no es que no me parezca carismática, pero no es "de las más carismáticas", que es a lo que me refería. Por lo menos para mi. Creo que secundarios como Retro o Sudou tienen más enganche que ella, aunque es cierto que las rarezas de Shinobu son un puntazo xD
Sobre Arata, tal y como quedó esta temporada imagino que tendrá más peso en la historia a partir de ahora, sip. Ya tocaba, a ver qué tal lo integran.
Jajaja, si no fuera porque ahora mismo los mangas que llevo por scans los llevo muy atrasados, hubiera empezado con ella ya xDDD Pero sí, imagino que me pasaré al manga, ¡y a ver si alguna editorial se anima a traerlo!
ResponderEliminarPobre Taichi sí, es que llega el otro pavo y con dos llamadas y aparecer por ahí ya le come todo el terreno. Meh xD Imagino que a partir de la siguiente temporada le darán más protagonismo, a ver si con eso me cae mejor, porque de momento, aunque mal no me cae, me es bastante indiferente xDDD
¡A ver qué tal la OVA de septiembre! Aunque tengo miedo que sea una historia paralela que no aparte gran cosa xD