Scott Pilgrim contra el Mundo

Ficha ha sido en FilmAffinity.

Originalmente Scott Pilgrim es una serie de 6 cómics publicados entre 2004 y 2010. Después del éxito en ventas la obra fue adaptada a la gran pantalla en 2010 por Edgar Wright (Zombies Party, Spaced), aunque al parecer adapta los cuatro primeros volúmenes. Y esta adaptación es la que he visto yo, sin conocer nada de los cómics. 

Scott es un chico que conoce a la que piensa que puede ser la mujer de sus sueños, Ramona. Pero conquistarla no será fácil, ya que tendrá que hacer frente a los malvados ex-novios de Ramona, que cuentan con una serie de poderes especiales y pondrán a prueba la voluntad de Scott.

Dicho así, la película suena a un desmadre argumental de escándalo... y lo es. Cuenta con un ritmo frenético, transiciones de escenarios ágiles y llamativas, algunos diálogos ácidos y batallas visualmente curiosas y entretenidas. Me pareció bastante original llevar las peleas psicológicas de las relaciones personales a un plano físico, de combates cara a cara y con superpoderes además, ya sea mezclando armas pixeladas o un combate de bandas musicales. Esto le añade un componente más exótico y ameno a la historia, que sorprendentemente no acaba de perder la cara ante tanto exceso. 

Porque al final, sorprende ver que la película deja poso. Después de cada pelea, vamos conociendo un poco más a los personajes, especialmente a Ramona. El toque más serio, por llamarlo de alguna forma, está bien introducido y va dejando su mensaje poco a poco de manera más que decente. Se van entendiendo las peleas y comportamientos de los personajes, las metáforas de sus luchas. Este punto me pareció bastante bien logrado y para mi es uno de sus mayores puntos a favor.

Otro punto a favor es que dadas las características de la película, visualmente es colorida y poderosa, y los efectos especiales cumplen por lo general bastante bien. Además los actores encajan bien con sus personajes, las actuaciones son correctas (algunas mejores que otras) y aunque ni Scott ni Ramona me resultaron personajes totalmente de mi agrado, sí que resultan creíbles (dentro de lo que cabe, claro).

Y por si fuera poco, esta película seguramente puede llamar la atención y agradar a todos aquellos con alma geek. Las referencias a los videojuegos con constantes en guiños como las monedas a recoger tras las batallas, o la estructura de fases de los ex-novios, hasta llegar al jefe final. Un recurso que queda bastante gracioso.

La película no es una obra maestra, tiene algún que otro altibajo a lo largo de su duración, y algunas de las fases son más entretenidas que otras, pero es una muestra más que válida y decente de cine de entretenimiento, para pasar un buen rato echándose unas risas.